El inicio del proceso constituyente en Ecuador en 2007 y las lecciones de la experiencia venezolana de 1999
DOI:
https://doi.org/10.18272/iu.v12i14.703Keywords:
proceso constituyente, autoritarismo, secuelas, reforma, acción política, consenso políticoAbstract
Una reforma constitucional, por tanto, para que trascienda, por sobre todo tiene que ser fruto de la inclusión y configurase en un instrumento para el consenso y la conciliación. Y ello es válido cualquiera que sea la motivación de la reforma constitucional. Esta, ciertamente, a veces ha sido el resultado de un armisticio después de alguna guerra fratricida, como tantos ejemplos nos muestra la historia; en otros casos, ha sido el resultado de una ruptura del hilo constitucional, mediante una revolución o un golpe de Estado, como tantos ejemplos también conocemos en América Latina; en otros casos, incluso, ha sido el resultado de un pacto para evitar la confrontación, formulado en democracia, como también nos lo muestra la historia. Pero en todo caso, lo esencial para que trascienda, es que debe ser un instrumento inclusivo, para la conciliación, que permita no sólo adaptar las Constituciones a las exigencias políticas de los tiempos contemporáneos, sino que las mismas sean efectivamente la manifestación de la voluntad popular.
Downloads
Published
How to Cite
Issue
Section
License
Submission of articles to be considered for the journal entails authorization for publication and acceptance of related, applicable rules. If not otherwise indicated, texts of the publication will be published under Creative Commons license.