#Maestro

Noticia, crónica.. ¡ficción!

News, Chronicle… Fiction!

Esteban Michelena
Universidad Hemisferios, Ecuador

#PerDebate

Universidad San Francisco de Quito, Ecuador

ISSN: 2588-0896

ISSN-e: 2697-3294

Periodicidad: Anual

vol. 7, núm. 1, 2023

Recepción: 22 Julio 2023

Aprobación: 15 Septiembre 2023



DOI: https://doi.org/10.18272/pd.v7i1.3059
Referencia este artículo: Michelena, E. (2023). Noticia, crónica... ¡ficción! #PerDebate, volumen 7 (pp. 20-25). Quito: USFQ PRESS.

Resumen: Hoy, cuando prevalecen la inmediatez y brevedad en un mundo digital que impacta y erosiona al oficio, el paso del periodismo a la literatura hace la diferencia. La iden- tificación del tema y su potencial narrativo, el dominio de los géneros periodísticos y el conocimiento de los recursos narrativos para contarlos desde la crónica son determinantes. Pero todo puede empezar en la noticia, acatando la regla de oro: la noticia da cuenta de un suceso, la crónica lo cuenta. Noticia, crónica… ¡ficción! En esta breve reseña el autor explica cómo es su proceso creativo de producción que lo lleva del periodismo a la literatura.

Palabras clave: Esmeraldas, marimba, crónica, ficción, Capote.

Abstract: Today, when immediacy and brevity prevail in a digital world that impacts and erodes the profession, the transition from journalism to literature makes a difference. The identification of the theme and its narrative potential, the mastery of journa- listic genres and the knowledge of the narrative resources to tell them from the chronicle are decisive. But everything can start in the news, abiding by the golden rule: the news reports an event, the chronicle tells it. News, chronicle... fiction! In this brief review the author explains how his creative production process takes him from journalism to literature.

Keywords: Esmeraldas, marimba, chronicle, fiction, Capote.

¿Viví lo que imaginé? ¿Imaginé lo que viví?, Petita Palma, matrona del folclor esmeraldeño

Atacames tonic (2002). No more tears (2018). El pasado no perdona (2022). La Diosa es un personaje que, en tres novelas sobre Esmeraldas, trasciende su edad, sabiduría y poderes. Custodia y portadora de los rituales ancestrales afroesmeraldeños, del monte y sus míticos habitantes es respetada por todos: su voz es la de una diosa, por eso habla con los ángeles y les hace encargos. Suele traer a los muertos del otro mundo, para consolar a sus deudos.

Este personaje —inspirado en la legendaria folclorista Petita Palma, a quien en los noventa arribó desde el periodismo cultural— está iluminado por el poderío y dulzura de la marimba, los cununos, la guazá, la guitarra: cantos a la vida, a lo divino y a la muerte.

Con la fortaleza de su aliento mágico, La Diosa es el foco de este artículo: un personaje que pasó de la noticia, al periodismo literario y, desde ahí, a la ficción. La Diosa pertenece a una realidad concreta: la cosmovisión afro en la vida del esmeraldeño.

La Diosa es el personaje estrella de esta trilogía de novelas
Foto 1
La Diosa es el personaje estrella de esta trilogía de novelas

Gran ejemplo para profundizar este tema es Gabriel García Márquez. El referente del realismo mágico publicó, en 1954, en El Espectador de Bogotá tres entregas de “La Marquesita de la Sierpe”. En estas crónicas explora las ciénegas desparramadas en Sucre, Costa Atlántica desde su tradición oral: hechicería, curanderos y supersticiones.

La obra, preservada en la antología Crónicas y reportajes, evidencia la impronta y vuelo del realismo mágico. García Márquez, en su búsqueda narrativa, decidió que, a ese tránsito entre la crónica y la literatura, le había llegado su mejor hora: Cien años de soledad que data de 1967.

Cometemos algo similar: contar realidades con los recursos de la literatura. Eso recojo en la novela Pase al vacío, publicada en 2010. Y hacer ficción, tres novelas alumbradas desde la experiencia y memoria de la reportería y el conocimiento del territorio narrativo.

Arrancar y atrapar, sostener y agradar, rematar arriba y memorable: tres momentos clave en cualquier relato que pueden ser previstos con su diseño editorial y gráfico y que he aplicado en mis novelas a partir de una visualización de la historia.

El diseño gráfico de una crónica es cercano al storyboard de una película: así se va a leer, así se va a ver. Es una puesta en escena del relato que, en mixtura de géneros, puede llegar al documental y otras realizaciones cinematográficas.

El diseño editorial previo aporta claridad sobre la identificación y manejo de las fuentes y los recursos narrativos aplicables: la determinación de los tiempos en el relato, su tono, aliento, inicio, desarrollo, ritmo, recuadros y el cierre de la pieza.

Obligado a conocer el legado de Tomás Eloy Martínez con Santa Evita (novela reportaje en 1995, serie de tv en 2022), Kapuscinski, Gay Talese, Norman Mailer, Tom Wolfe (La hoguera de las vanidades, novela en 1987, película en 1990), entre otros del Nuevo periodismo. Pero la obra indispensable es A sangre fría, de Truman Capote.

En 1966, está non fiction novel o novela testimonio que surge de los artículos de Capote y el impacto mediático del asesinato de la familia de granjeros Clutter, en Kansas, hacia 1959 a manos de dos rateros. Esta genialidad es de indispensable lectura y riguroso análisis: cómo se hizo la obra que, nacida del periodismo, arribó a la novela y cerró con la película, “Cold blood” de Richard Brooks en 1967.

Para su obra maestra, Capote, por medio de la investigación y la técnica de la entrevista en profundidad, se sumergió en la vida y el alma, en los abismos sociales y sicológicos de Perry Smith y Dick Hickook, condenados a la horca en 1965.

Hace poco, el novelista español Lorenzo Silva contaba del uso de los recursos como entrevista, archivos, fuentes y otros —propios a la crónica histórica— en la construcción de su libro Sangre, sudor y paz: La Guardia Civil contra ETA. Esta obra fue escrita a seis manos con Manuel Sánchez y Gonzalo Araluce sobre la violenta irrupción de terroristas vascos en la vida de los españoles.

Hacia 2008, en una conversación con Martín Caparrós, teorizamos al respecto. Y concluimos: la noticia da cuenta de un suceso, la crónica lo cuenta. Y de ahí se deriva el trayecto a la literatura y al cine.

Y, pese a que existen temas más atractivos (un boxeador antes de disputar el título mundial) que otros (vacunación infantil) para que sean tratados desde

el periodismo literario, la gama de recursos del oficio puede aplicarse a todos. Todo pasa por el cómo.

La clave está en la identificación del tema y su potencial para ser resuelto desde el periodismo literario, sin omitir la regla de oro: la crónica es auditada por la realidad. Y la ficción, por la verosimilitud.

Los tiempos a correr en una crónica no siempre van según el orden cronológico de los hechos. La dedicada al título mundial de box podría arrancar con el final del combate; como podrían hacerlo el documental o la película. El campeón en su caída a la lona es la foto de primera página y apertura de la crónica. También puede ser el afiche y primera escena de la película.

Las fronteras de los géneros pueden ceder. La novela y la crónica son como el jam de cierre de un concierto de jazz: ciertamente, entra todo. Un concierto de una folclorista esmeraldeña puede ser noticia y luego pervivir en una antología de crónicas o en tres novelas. Noticia, crónica… ¡ficción!

Es pertinente servirnos de la convivencia entre géneros, partiendo de la noticia y su objetividad y sencillez, llegando al periodismo literario y cerrando con la ficción, mediante el uso apropiado de métodos, herramientas y recursos que sirven a estas tres realizaciones.

La noticia da cuenta, la crónica cuenta, la ficción vuela. Con eso claro, todo es posible. Lo podrán constatar en Atacames tonic, No more tears . El pasado no perdona.

Foto 2. Estas tres novelas del autor tienen una secuencia narrativa basada en la historia de Esmeraldas

Estas tres novelas del autor tienen una secuencia narrativa basada en la historia de Esmeraldas
Foto 2
Estas tres novelas del autor tienen una secuencia narrativa basada en la historia de Esmeraldas

Referencias

Caparrós, M. (2008). Entrevista personal con el autor.

Capote, T. (1987). A sangre fría. Editorial Anagrama. Publicación original de

García Márquez, G. (1954). La Marquesita de la Sierpe. En Crónicas y reportajes

(1976). Editorial La Oveja Negra.

(1967). Cien años de soledad. Editorial Sudamericana.

Michelena, E. (2002). Atacames Tonic. Paradiso Editores.

(2010). Pase al vacío. Paradiso Editores.

(2018). No more Tears. Paradiso Editores.

(2022). El pasado no perdona. Paradiso Editores.

Modelo de publicación sin fines de lucro para conservar la naturaleza académica y abierta de la comunicación científica
HTML generado a partir de XML-JATS4R